La regla de los tercios es quizás la más conocida “regla” de la composición fotográfica.
Teniendo en cuenta que la regla de los tercios es quizás la más popular (sin duda la más conocida) forma de componer una imágen, pero hasta hace muy poco, caí en cuenta de que no todo el mundo está familiarizado con esta guía de composición.
¡Pero eso está bien!
Después de todo, la primera razón por la que estamos aquí es para aprender. ¿No?
Lo que me pareció un poco preocupante es que en realidad no tenemos un artículo sobre la regla de los tercios. Y es momento de que rectificar el problema!
Un poco de historia…
Resulta que la ley o regla de los tercios no empieza sólo en el área de la fotografía; los que pensaron que es una ley moderna pues no es así, esto empezó mucho antes.
La cuestión es, que los pintores de la época renacentista (siglo XX-XVI) quisieron darle sentido a sus obras, y su objetivo era simplemente proporcionar a sus pinturas dimensiones para que pudieran contar una historia por sí solas.
Los artistas del Renacimiento llegaron a la conclusión de que el ojo humano, nunca descansa en el centro de la pintura, más bien, el ojo quiere recorrer cada centímetro de la misma.
Ya luego al pasar del tiempo, esta regla de oro, se fue conservando y aplicando en otras disciplinas, y así fue como llegó hasta la fotografía, aplicándose de la misma manera que en la pintura.
¿Cuál es la regla de los tercios?
Lo primero que todo fotógrafo debería saber es que esta regla es netamente visual, no se trata de adivinar, ni mucho menos, se trata de hacer que tu imágen tenga puntos claves donde el ojo descanse.
Deberías ver la regla de los tercios como la opción por defecto de la composición para la mayoría de los fotógrafos, sin duda, la pauta más popular.
Básicamente, se establece que, durante el proceso de composición de una fotografía, el marco debe estar dividido en nueve rectángulos iguales por cuatro líneas que se cruzan, dos de los cuales cortan la trama en tres partes verticalmente, los otros dos – horizontalmente.
Un popular 3: Marco 2 se divide así:
Como puedes ver, un marco cuadrado se divide en nueve cuadrados iguales más pequeños.
Los elementos de importancia dentro de una trama dada se deben colocar en los puntos de intersección de estas líneas, como se muestra en el esquema anterior, o ir junto a ellos.
Así, por ejemplo, la imágen de un paisaje compuesto perfectamente de acuerdo con la regla de los tercios significa que el horizonte colocado en cada una tercera parte de la estructura de la parte inferior, o un tercio de la parte superior.
(Si el horizonte es un elemento clave en la fotografía dada , por supuesto):
Es importante tener en cuenta que además de la regla de los tercios, también se puede seguir utilizando las otras guías de composición.
Por ejemplo, dejé un montón de espacio en la parte superior del marco con este retrato y aunque lo interesante del sujeto quedó situado en el eje vertical derecho, todo el motivo se concentra en la tercera parte de la trama horizontal.
¿Por qué es tan popular la regla de los tercios?
La regla de los tercios es un derivado de la media de oro muy conocida, una directriz composición y proporción basada en la sucesión de Fibonacci.
Y, si estás sorprendido de encontrar el arte y las matemáticas, pues sí, tienen algo en común.
La media de oro se conoce desde hace miles de años, si no me equivoco.
Sea como fuere, la media de oro es una relación que la gente encuentra que es particularmente agradable y natural.
Básicamente, se considera para definir la proporción perfecta y también se encuentra no sólo entre los objetos de arte, sino también en la naturaleza.
Por lo tanto, debido a que la regla de los tercios es un derivado de la proporción áurea, es fácil entender por qué nos encontramos con que fuera tan agradable a la vista.
Pero esa no es la razón principal de su popularidad.
Si observas, la relación perfecta que he mencionado es de aproximadamente 1: 1.619 y, a medida que lo entiendes, no es particularmente fácil de pre visualizar a la hora de componer una fotografía a través del visor.
En pro a la regla de los tercios con su simple división en tres partes aproximadamente iguales. Es mucho más fácil de aplicar en la práctica, sin embargo, conserva la parte más grande de la estética de la proporción áurea.
Eso es lo que hace que sea tan accesible y utilizable por la mayoría de los fotógrafos, y no sólo los principiantes.
Como se puede ver en las imágenes, aplico la guía de vez en cuando.
Una vez dicho esto, no soy demasiado fan de este tipo de composición y rara vez sigo las reglas (tenía que ajustar o agregar algún recorte de algunas de las fotografías mostradas aquí como me costó encontrar suficientes ejemplos), pero esto ocurre de forma natural de vez en cuando.
La regla de los tercios, sin duda vale la pena aprender a utilizarla.
Puede ser la guía para las masas de fotógrafos, pero por una razón, es a la vez fácil de aprender y muy eficaz.
Sin embargo, si tu quieres seguir cuidadosamente esta regla es una cuestión totalmente diferente, ya es cuestión de criterio.
Yo sugiero que experimentes la búsqueda de lo que parece ser la mejor composición para ti y para cada fotografía que tomas y no sólo a tomes la decisión por defecto.
Si el aprendizaje de la regla de los tercios es un paso en la dirección correcta, saber cuándo no se aplica es un salto en la comparación.
Déjale espacio suficiente al sujeto
También puedes utilizar la regla de los tercios para componer fotos donde el sujeto está mirando hacia la izquierda o la derecha del marco.
Lo mejor es dejar más espacio en la dirección de su mirada, ya que les da espacio para “mirar.” Al igual que en los sujetos en movimiento, que permite al espectador seguir la mirada del sujeto y tener una idea de lo que estaban viendo.
Si deja más espacio detrás de ellos que delante, parece que estaban buscando fuera del marco. A veces esto puede funcionar, ya que crea una sensación de misterio, pero en general se debe dejar más espacio delante de sus ojos que por detrás.
Posicionar los ojos según la regla de los tercios
Si vas a tomar retratos de personas o animales, utilizar la regla de los tercios para ayudar a que la posición de la cara y los ojos estén dentro de la escena.
Los ojos son donde se señala la mirada del espectador en primer lugar, por lo que el posicionamiento de ellos, fuera del centro de acuerdo con la regla de los tercios por lo general crear la composición más fuerte.
Lo ideal es que ambos ojos, se ubiquen a lo largo de la línea de cuadrícula superior. Si el sujeto está planteando lado de mano y sólo se puede ver un ojo, posicionar el ojo en el punto de unión donde dos líneas se encuentran.
Posiciona el horizonte en los paisajes
Si va a fotografiar paisajes, la regla de los tercios es una de las primeras cosas que debes pensar en la hora de componer la fotografía.
En general, los paisajes no se ven bien si el horizonte se coloca directamente a través del centro de la foto. Posicionar el horizonte tiende centralmente a picar la foto en el medio, y no es muy agradable a la vista.
Para una composición más equilibrada de forma natural, lo mejor es colocar el horizonte en o cerca de una de las líneas horizontales tercios. Ya sea que se coloque en la línea de cuadrícula superior o inferior dependerá de lo que se quiere destacar en la escena.
Coincidencia, sí coincidencia
Otra técnica utilizada para crear movimiento se llama una coincidencia . Esta se define como relaciones de borde a borde, que unifican múltiples elementos y que pueden crear movimiento lateral a lado y de arriba a abajo.
No es una línea continua como se podría pensar cuando escucha el término “líneas principales.” Está roto, oculto, y un truco de magia, que podemos utilizar para permitir que la mente le resulta difícil cerrar las brechas.
Contrapunto
El contrapunto me lo ponen un poco difícil, pero tengan paciencia conmigo. Ya lo entenderás.
Lo que realmente significa, es que mediante la colocación del punto focal principal de la imágen en la posición de terceras partes, se puede colocar un punto focal secundario en la posición tercios diagonalmente opuestos.
¿Que qué?
En el estudio de la red por encima, imaginarlo sobre una imagen y verá los puntos de intersección de las líneas. Estos son los puntos focales.
Simetría dinámica
¡Tienes que ser atrevido!
La regla de los tercios no sólo se trata de dividir un cuadro en nueve pequeños cuadros en tooodas las ocasiones, más bien se trata de innovar…
Si los nuevos artistas comienzan con la red de simetría dinámica en lugar de la regla de los tercios, serían capaz de tomar ventaja después de las diagonales, que se pueden crear con el ritmo … al plantear el modelo, o la aplicación de trazos de pintura.
Las diagonales disponibles dentro del rectángulo limitarán el número de direcciones que utiliza, denomina la gama, y crearás una composición más potente … en lugar de los radios de una rueda de bicicleta.
La simetría dinámica estudia qué es lo que al ojo le gusta ver (tema que se dieron cuenta los Renacentistas)
En pocas palabras la simetría dinámica trata de un sistema de red, que podemos utilizar en nuestra fotografía para ayudar a organizar nuestra composición.
Podemos utilizar las diagonales, verticales y horizontales, para ayudarnos a crear el ritmo y la unidad de toda la imágen … si se trata de una pintura, fotografía o escultura … simetría dinámica se pueden utilizar para todos ellos.
Añade elementos curvilíneos
Esta es una técnica bastante efectiva para inducir al ojo a que mire todos los focos especiales de la imágen, que en nuestro caso, se cumplen con la regla de los tercios.
Muchos maestros de la pintura la utilizaban, a continuación les muestro una pintura de Vicent Van Gogh para que puedan comprobarlo:
Busca el centro
Generalmente se dice que para que la regla de los tercios se haga más efectiva, hay que buscar de descentralizar el sujeto principal. Pero esto no siempre se cumple!
Hay una técnica llamada psicología de la Gestalt la Ley de Simetría, que quiere decir que la mente humana siempre está tratando de encontrar el equilibrio en los estímulos visuales.
Hay momentos que el ojo necesita un equilibrio (depende el contexto de la imágen) y si simplemente, lo logras centrando a tu sujeto pues, ¡hazlo!
Recuerda que la única tarea ardua para descentralizar tu objeto y cumplir con la regla de los tercios, es saber equilibrar con planos secundarios al principal. De lo contrario, tendrás una composición minúscula.
Muchos trucos y técnicas se pueden poner a prueba para crear una composición extraordinaria, que comunicará con claridad a tu espectador lo que exactamente quieres decir.
Deja atrás la rejilla tradicional de la regla de los tercios y adopta la rejilla simetría dinámica que es muy fácil de usar, y puede dejar a muchas más opciones abiertas para que mejores la calidad de tus fotografías en cuanto a composición se refiere.
Si te ha parecido útil la información de este artículo o tienes alguna otra manera de utilizar la regla de los tercios a modo de composición fotográfica, compártela conmigo por medio de un comentario.
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